Hola!
Boliche es un schnauzer mediano al que sus dueño adoran. Su historia es que un día se despertó con un dolor muy fuerte en la columna, lo llevaron al hospital y les comunicaron que tenía una hernia en T13-L1 que debían operar. Y aunque el dolor era el único síntoma de Boliche decidieron operarlo. El resultado fue que tras la operación, Boli se encontraba peor, una operación de este tipo tiene un post operatorio difícil, en este caso, apenas tenía fuerza en las extremidades posteriores, arrastraba los pies y no conseguían que volviese a ser el de siempre.
En ese punto de desesperación es donde yo encontré a sus propietarios, confiaron en mi desde el principio, tras la segunda sesión Boli ya conseguía rascarse por sí mismo, no sabéis que alegría! Y así poco a poco comenzó a hacer cosas que no hacía como subir las manos al sofá y arrastrar menos los pies.
Esta es una forma fabulosa de integrar medicina occidental y oriental, los periodos de post operatorio se acortan un montón.
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